"Llevaba la bolsa vacía pero siempre que entraba la mano en ella, era capaz de extraer la magia de las palabras para regalársela a todo aquel que las quería. Escribía por las noches, robándole horas al tiempo al sueño y a él mismo. Un día al entrar la mano descubrió con incredulidad que no podía sacar más palabras. Y lo peor era que necesitaba con urgencia las palabras, silencio, mañana, beso, mar y cielo. Esas por no citar otras de menor importancia para el escrito: Dos adjetivos, un adverbio, un verbo auxiliar, uno reflexivo. Que espanto."

sábado, 28 de marzo de 2009

VIDA EN LA CAJA por David Malpartida

Dentro de mí hay recuerdos
canicas que brincan
muñecos que ilusionan
una lupa que me observa
fotos olvidadas que no tienen nombre.

Llaves que abren deseos
una flauta que nadie toca
una felicitación que dice, "Te quiero"
un reloj que tic tea hasta morir
un caramelo que endulza mi vida
unas zapatillas que me patalean
unos guantes que hacen muñecos de nieve.

El sol que intenta entrar en mí
risas que nunca callan
dentro se encuentra el alma
de un niño querido.








2 comentarios:

  1. Muy bueno David. Converva siempre esa caja, esas cosas son las que nos dan la vida.
    Pilar Rdt

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  2. Ups, perdón, quería decir "conserva"
    Saludos

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